Obispo Benjamín Jiménez Hernández Pide por la Paz en Culiacán Durante el 478 Aniversario

b2f03de7-3768-4da2-8979-bb0375698860

Teniendo como marco los festejos del 478 aniversario de Culiacán, el obispo Benjamín Jiménez Hernández exhortó a la sociedad a orar por nuestra ciudad para que termine la violencia.

Durante la misa de acción de gracias el presbítero pidió por la protección de las familias y en particular por los jóvenes y niños que son los más vulnerables y quienes han sido víctimas de la inseguridad en nuestra ciudad.

«Hay que pedir por las familias, nuestros hijos y jóvenes, por su protección», dijo el obispo.

El obispo auxiliar, Emigdio Duarte Figueroa también tuvo sus consideraciones: Lo que vivimos ahora son las consecuencias de nuestra historia; pero visto esto, con el juicio y el enfoque de la fe, permite verlo hacia el futuro. Que «la ciudad de Culiacán fue una bendición» al haber recibido el bautizo con ese nombre, «consagrada como una ciudad bajo el patrocinio de San Miguel Arcángel.»

Y seguidamente se preguntó: «Cómo se vería Culiacán si no estuviera protegida por San Miguel Arcángel, si está como está. Bueno… eso ya se lo dejamos a Dios». Y que «mas allá de las manifestaciones de la violencia y de crisis de valores, Dios hace su obra pero también pide nuestra colaboración».

Expresó que cualquier persona que promueva la violencia en cualquier ciudad o cualquier pueblo o cualquier nación, «son personas que manifiestamente están en contra de la paz y del bienestar». Abundó que si bien hay personas que actúan así, afortunadamente «somos muchos más los que queremos algo diferente».